CONFESIÓN DE AMOR

Los arpegios te rinden homenaje en mis sueños

esperando acariciarte,

mujer de mis desvelos.

Si supieras lo mucho que eres en mi alma,

tal vez me atrevería a decirte:

que sólo tú iluminas mis días;

que eres la razón por la que despierto en la mañana.

Una rosa perfuma tu piel de terciopelo.

Tus ojos, dos luceros azabaches tan plenos de vida.

¿Acaso no imaginas que a veces siento celos

de todo lo que pueda aproximarse a ti?

Siempre en silencio te he amado

porque somos amigos y temo

no sientas lo mismo por mí.

Tú eres sólo tu :

El único ser que aprendí a querer,

mi dulce amor que me roba las sonrisas,

Dulce Mujer.

Si un día me atrevo quizás comprendas

que aun cuando es de noche

junto ti siempre puedo amanecer.



Humberto Bianchi
5 de Marzo de 2009

Leia Mais…

VOY...

VOY...

Voy andando trayectos

de aquel viejo camino que un día fuera nuestro,

hoy son rutas olvidadas;

como los peregrinos con devoción recuerdo

aquel hermoso sueño que sólo ha sido mío.



Voy andando ilusiones

que de ser primaveras se han vuelto gris otoño,

las hojas secas son pruebas de tus mentiras:

"Desangra, corazón, a ver si al fin te olvidas

y crees que esto fue sólo una pesadilla."



Voy queriendo olvidarte pero no lo consigo,

al fin más te recuerdo cuando tú ni me miras,

nunca supiste amarme como lo hice contigo;

tú fuiste la rosa que perfumó mis ilusiones

y ahora te has marchado dejándome tan sólo

un camino de espinas.



©®Humberto Bianchi
Todos los Derechos Reservados
10 de Octubre de 2007

Leia Mais…

A TI, MUJER

A TI, MUJER

A ti, mujer de dulces alboradas
que me regalas la dulzura de un beso,
me cautivas en la luz de esa mirada
que me envuelve y me seduce hasta quedarme preso


A ti, mujer, la única que amo desde siempre,
te doy uno a uno mis instantes,
mis latidos, mi ser y hasta mi esencia;
y si la vida acaso me pidieras,
también te la daría porque prefiero no vivir
a la locura inmensa de perderte.


©®Por Humberto Bianchi
12 de Enero de 2008

Leia Mais…

CAE LA NOCHE

CAE LA NOCHE

Cae la noche
y en medio de las estrellas logro atrapar
la luz de tu recuerdo.
Los silencios se apoderan de mi alma lento...
cierro los ojos abrazando tu cuerpo.

Cae la noche,
al llegar el alba rendido de cansancio, amor,
al fin me duermo.
Me pregunto: ¿dónde estás?
Si siento en mis labios
el fuego ardiente de tus besos.

Despierta el día y cae la noche.
Sin ti a mi alrededor todo es vacío,
pero te espero como espera el hogar
un nuevo leño para que al encenderse
todo se colme de calor y cese el frío.

Cae la noche, amor, y sólo sueño.
Sólo sueño volver a estar contigo.


©®Por Humberto Bianchi
09 de Julio de 2008

Leia Mais…