Los arpegios te rinden homenaje en mis sueños
esperando acariciarte,
mujer de mis desvelos.
Si supieras lo mucho que eres en mi alma,
tal vez me atrevería a decirte:
que sólo tú iluminas mis días;
que eres la razón por la que despierto en la mañana.
Una rosa perfuma tu piel de terciopelo.
Una rosa perfuma tu piel de terciopelo.
Tus ojos, dos luceros azabaches tan plenos de vida.
¿Acaso no imaginas que a veces siento celos
de todo lo que pueda aproximarse a ti?
Siempre en silencio te he amado
porque somos amigos y temo
no sientas lo mismo por mí.
Tú eres sólo tu :
Tú eres sólo tu :
El único ser que aprendí a querer,
mi dulce amor que me roba las sonrisas,
Dulce Mujer.
Si un día me atrevo quizás comprendas
que aun cuando es de noche
junto ti siempre puedo amanecer.
Humberto Bianchi
5 de Marzo de 2009
Leia Mais…
Humberto Bianchi
5 de Marzo de 2009